Si ya has terminado tus vacaciones pero te gustaría seguir disfrutando de ese precioso tono dorado en tu piel, te ofrecemos unos consejos para prolongar el bronceado: es muy sencillo, solo requiere de algunos cuidados y dedicación. ¿Quieres saber cómo?

Una vez que dejas de tomar el sol de forma continuada, ¡tu bronceado puede desaparecer en cuestión de una semana! ¿Vas a desperdiciar tanto esfuerzo? Con estos sencillos consejos conseguirás prolongar el bronceado de tu piel hidratándola desde todos los frentes y, sobre todo, nutriéndola con vitamina E:

1. Mimos y cuidados: Lo primero es evitar que la piel se reseque, porque perderíamos demasiadas células muertas y dañaríamos nuestros tejidos. Lo recomendable es emplear exfoliantes muy suaves, importante lo de que sea suave porque de otra forma acabaríamos con el bronceado en una única sesión. Olvídate del guante de crin que es agresivo y extremadamente duro. Si empleamos tratamientos exfoliantes suaves eliminaremos células muertas, dejando una piel más tenue pero sin llegar a dañarla. Tenemos a nuestra disposición un amplio abanico de productos cosméticos que pueden ayudarnos. Busca aftersun y serum faciales con fórmulas hidratantes, antioxidantes, reparadoras y antirradicales libres y, por supuesto, enriquecidas con vitamina E, que calma y nutre la piel.
2. Alimentación: Los tomates, zanahorias, alcachofas, espinacas, melocotones y frutos secos ayudarán a mantener los niveles de vitaminas que nuestra piel necesita para lucir radiante.
3. El agua es un gran aliado de la belleza: no dejes de beber agua y siempre que puedas también zumos naturales de tomate o frutas.
4. Inyección de betacaroteno: En farmacias y herboristerías puedes comprar cápsulas y complementos enriquecidos con betacaroteno, que además de tener una función antioxidante, estimula la producción de melanina.
5. Tratamientos faciales y corporales: Desde mascarillas hidratantes o tratamientos para combatir las manchas faciales, hasta envolturas con dosis extra de hidratación para el cuerpo. Elige el tratamiento más se adapte a tus necesidades y regálale a tu piel la elasticidad y brillo que merecen.
6. Un rayo de sol: Aprovecha los fines de semana y las horas libres para, si sale el sol, seguir disfrutando de sus rayos. Una terraza, una escapada a la playa, una salida por el campo o un jardín… Cualquier excusa es buena para continuar brillando bajo el sol.
7. Los polvos bronceadores son mágicos: Aplícatelos con una brocha redonda en pómulos, mentón, frente y nariz. Utiliza un colorete rosado, verás el resultado.
8. Los autobronceadores también ayudan en el objetivo de mantener bronceado. El paso del tiempo ha ayudado a que estos productos mejoren en eficacia y calidad… Puedes encontrarlos en aceite, cremas o toallitas (estas últimas mejor para cara y escote). Aplícalos una o dos veces por semana teniendo especial cuidado en hacerlo de forma uniforme y obtendrás una piel luminosa y natural.
9. Regálate una sesión UVA: Los rayos UVA también pueden ayudarnos a conservar nuestros bronceado durante parte del otoño e invierno. Bastará con darte una sesión de cinco minutos una vez a la semana.
10. ¡Sentirnos bien! Expertos y profesionales aseguran que las horas de luz y las vacaciones ayuda a sentirnos bien. El hecho de vernos bronceadas también aumenta nuestra autoestima, razón de más para prolongar, todo lo que podamos, el tono de piel conseguido este verano.

Fuente texto: Tecno-Belleza
Imagen: Fotolia

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